En Las Vegas, Estados Unidos, el 28 de junio de 1997, Evander Holyfield defendía su título mundial del peso completo, y por segunda vez se enfrentaba a Mike Tyson, a quien había vencido por nocáut técnico en el primer combate. La expectativa era muy grande y las apuestas a favor de uno y otro pugilista eran millonarias.
Lamentablemente la pelea será recordada en la historia del boxeo por una cuestionable acción, pues Mike Tyson, hoy de 51 años, le arrancó de una mordida parte de la oreja a Holyfield, conmocionando a las autoridades y público presente, y a los millones de televidentes en todo el mundo, que no daban crédito a lo que acababa de suceder .
Sin ninguna explicación coherente, cuando falta de 40 segundos para concluir el primer asalto, Tyson lanzó una mordida en el cartílago de la oreja derecha de su rival, por el criticable acto fue descalificado y se le descontaron 3 millones de dólares de la bolsa inicialmente pactada.
El junio 30, Tyson se disculpó afirmando que había perdido la cabeza y no tenía idea porque había reaccionado así. Holyfield necesitó ocho puntos en la oreja. Las autoridades le revocaron la licencia a Tyson, la que le fue restaurada en octubre del 98. Muchos años después, Holyfield declaró que había logrado perdonar a Tyson.
