El abuso de poder disfrazado de estrategia presidencial sigue en marcha. La defensa de Pedro Castillo arremete nuevamente contra la Policía que investiga al presidente de la República. No bastó un primer documento planteando la destitución de Harvey Colchado, sino que hoy incluyen a la mujer policía que custodió a la detenida cuñada-hija Yenifer Paredes.
Se trata de la capitana que no se doblegó a los reclamos de Yenifer Paredes y que participó del allanamiento a la residencia de Palacio de Gobierno. Todo vale en esta guerra iniciada por el mandatario en la que busca desprestigiar al coronel de la PNP que le pisa los talones.
No hay límite para esta campaña de desprestigio que hace dos semana denunció en Panorama el exministro del Interior, Rubén Vargas. La información recibida por el exministro detalla que dentro de los penales se estaría moviendo una maquinaria que busca contactar a todo aquel que haya sido detenido, excarcelado o que haya colaborado con el trabajo de Harvey Colchado, no importa la imputación que realice siempre y cuando contribuya a su desprestigio.
¿Abuso de poder o estrategia presidencial?
Se busca desde el Estado que los policías que investigan al presidente y a su familia vivan en zozobra y bajo constante amenaza, lo que indica que el presidente como jefe de las Fuerzas Armadas evoque esfuerzos para perseguir a subordinados.
