En un día inesperado para muchos, finalmente se conoció la decisión del Tribunal Constitucional, cuyos cuatro magistrados fallaron a favor del hábeas corpus de Keiko Fujimori, en consecuencia, de otorgarle su libertad.
La noticia cayó como un balde de agua fría para Mark Vito, quien se encontraba en su décimo tercer día de huelga de hambre en una carpa de los exteriores del penal Anexo Mujeres de Chorrillos. Fue tanta su emoción, que comenzó a llorar de felicidad. Consultado sobre cómo tomó la noticia su esposa, indicó que fue el mismo sentimiento.
"He hablado con Keiko y ella tiene las misma lágrimas de felicidad, está muy emocionada", contó a la prensa. A los minutos, excongresistas naranjas llegaron raudamente al penal para extenderle un abrazo a la recluida.
Úrsula Letona manifestó que antes de que pensara en otra cosa como en política, la encantaría ver a Keiko abocada a sus hijas y a su esposo Mark Vito.