Luego de que otra noticia de muerte sacudiera la ciudad de Juliaca (región Puno), se puso nuevamente sobre el tapete la forma en que los integrantes de la comunidad Aimara toman la justicia por sus propias manos.
Esta vez fue un ladrón quien murió luego de ser quemado en las calles de la mencionada localidad andina, al respecto los representantes de esta etnia indicaron que los Aimaras han vivido separados del Estado peruano por 500 años, lo cual los hace susceptibles ante hechos como este.


