El periodista y abogado Gastón Medina Sotomayor fue asesinado en circunstancias violentas, horas después de haber denunciado en su programa en vivo irregularidades dentro de la municipalidad de Ica, relacionadas con la compra de camiones compactadores. Medina, quien se mostró crítico de la gestión del gobierno regional y el municipio, había alertado que los camiones adquiridos eran, en realidad, chatarra, a pesar de los esfuerzos por presentarlo como un ahorro para el Estado.
Medina también estaba investigando casos de extorsión a colectiveros, lo que lo convirtió en blanco de amenazas desde 2022. De acuerdo con diversas fuentes, como el Instituto de Prensa y Sociedad (IPYS), el periodista había recibido constantes advertencias de muerte. En 2022, incluso un cartucho de dinamita fue lanzado en el canal de televisión donde trabajaba, y dejaron un perro muerto como señal de intimidación. Las amenazas se intensificaron con el paso del tiempo, mientras Medina continuaba con su labor.
En su último informe, transmitido horas antes de su muerte, Medina expresó su esperanza de que los responsables de la compra fraudulenta de los camiones fueran identificados y enfrentaran la justicia. Señaló que uno de los miembros del comité encargado de la compra tenía pruebas, como audios y mensajes de WhatsApp, que demostrarían que fue presionado para proceder con la compra ilícita. “Aquí que caigan los verdaderos culpables”, dijo en el programa, sin saber que él mismo sería víctima de la violencia.
EXIGEN INVESTIGAR CRIMEN
El asesinato de Medina ha generado una fuerte condena en el ámbito periodístico. La Asociación Nacional de Periodistas de Perú y la Federación de Periodistas de América Latina y el Caribe exigieron una exhaustiva investigación para esclarecer las circunstancias del crimen y llevar a los responsables ante la justicia. La comunidad periodística exige respuestas rápidas ante este crimen que silencia la voz de aquellos que luchan contra la corrupción y el abuso de poder.
