La situación de los migrantes en la frontera entre Perú y Chile se agrava con el pasar de los días. Por la mañana, los ciudadanos extranjeros aguardaron dentro de sus carpas instaladas en la línea de la Concordia, a la espera de ser empadronados por las autoridades chilenas para ser enviados en un vuelo humanitario a su país de origen.
Durante este tiempo, un grupo de tacneños llegó hasta la frontera para entregar ropa y alimentos a los más vulnerables. Con el pasar de las horas, el malestar de estas personas iba en aumento por lo que decidieron bloquear la pista en ambos sentidos como medida de protesta.
Esta nueva acción de protesta por parte de los migrantes, perjudicó a conductores y pasajeros quienes permanecieron en este punto hasta que la vía sea liberada. Algunos de ellos, cansados de esperar decidieron coger sus maletas para caminar por varios kilómetros.
Sin embargo, esta situación se descontroló cuando las personas atrapadas comenzaron a discutir con los extranjeros, generándose un enfrentamiento donde un conductor de nacionalidad chilena sufrió el ataque a su vehículo.
Luego de varios minutos, la Policía Nacional pudo desbloquear la carretera en medio de una lluvia de piedras que eran lanzada por los extranjeros quienes intentaron nuevamente cruzar hasta territorio peruano siendo impedidos por los agentes.
Cabe detallar que cómo parte de las acciones de control fronterizo tras el estado de emergencia declarada por el Ejecutivo, el ministro del Interior, Vicente Romero, viajó hasta Tumbes donde constató el despliegue policial en el canal internacional.
Allí señaló que el han tomado medidas para mejorar la calidad de vida de los migrantes y que aquellos que cometan delitos serán expulsados. Por último, Romero hizo entrega de una camioneta policial y cinco cámaras corporales que servirán de apoyo en este patrullaje preventivo.
