El caballito de totora fue diseñado para transportar a un navegante con sus aparejos utilizados durante las faenas de pesca marina en el Perú y lacustre en Bolivia.
Es una herencia, fundamentalmente, de las culturas Mochica y Chimú que se ha mantenido a lo largo del tiempo y que constituye un símbolo representativo de la identidad del departamento de La Libertad con un insondable valor histórico. Hoy, los pescadores de Huanchaco continúan, a través del paso de los siglos, con la construcción de esta tradicional embarcación.
Asimismo, cada año en Huanchaco se realizan importantes campeonatos de deportes acuáticos, en donde los caballitos de totora son los principales protagonistas. En estos campeonatos participan surfistas profesionales de todo el mundo, así como expertos en caballitos de totora.
Por lo general, los caballitos de totora miden entre 3 a 4 metros de largo y un ancho de 60 centímetros a 1 metro. Cuando están secos pueden llegar a pesar entre 40 y 50 kg, y son capaces de soportar hasta 200 kilos de carga útil. Como mencionamos anteriormente, están diseñados para transportar a una persona.
