Como se recuerda Alan Azizollahoff y Edgar Paz, dueños de la discoteca Utopía, donde murieron 29 personas en el 2002, fueron sentenciados en 2014, el recurso legal había sido presentado por Clara Ravines, madre de Edgar Paz. Hasta la ciudad de Cajamarca llegaron los familiares de los fallecidos, que estaban preocupados porque la resolución beneficiaría a los empresarios que están prófugos de la justicia.
El 8 de abril del 2014, el 21 Juzgado Penal de la Corte de Lima condenó a cuatro años de prisión efectiva a Azizollahoff y a Paz, y al pago de una reparación civil de 70 mil soles. El 13 de mayo, del mismo año, se solicitó la extradición de ambos.