Los representantes del transporte urbano organizado, agrupados en Transporte Unido, manifestaron este viernes 5 de diciembre su profunda preocupación por el incremento de hechos delictivos que afectan al sector y ponen en riesgo la seguridad de choferes, cobradores, pasajeros y personal de apoyo. En un comunicado, los gremios señalaron que la ineficacia del Estado frente a la extorsión, los ataques armados y la acción de organizaciones criminales ha alcanzado un punto crítico.
PLAZO DE SIETE DÍAS
Ante esta situación, los transportistas exigieron al Poder Ejecutivo presentar, en un plazo de siete días, un “plan maestro de acción efectivo” contra la inseguridad. De no recibir respuesta satisfactoria, advirtieron que podrían convocar a una nueva jornada de paralizaciones de 48 horas.
Entre las principales exigencias, Transporte Unido solicitó el fortalecimiento inmediato de la Unidad Operativa contra la Extorsión con presupuesto, tecnología y personal especializado; la implementación efectiva del protocolo de reserva de denuncias; sanciones a cuentas vinculadas a extorsiones y a proveedores de chips fraudulentos; así como la aprobación urgente de reglamentos y modificaciones de leyes que actualmente generan impunidad frente a la violencia en el transporte público.
"Terminados los siete días hábiles, se determinará un paro de 48 horas, lamentablemente la situación se ha agudizado [...] hemos tenido reuniones con el presidente Jerí solo para la foto, no vemos visto avances en la lucha contra las extorsiones", dijo Martín Ojeda, director de la Cámara de Transporte.


