Las obras del teleférico de Miraflores, proyectadas para culminar en octubre de este año, fueron paralizadas temporalmente por disposición de la Municipalidad del distrito. La decisión fue tomada luego de que se detectaran irregularidades durante la colocación de piezas de anclaje en el acantilado, a la altura del Parque Domodossola, uno de los principales puntos de la obra.
Como medida inmediata, grandes bloques de cemento fueron colocados en los accesos al área de construcción para impedir el ingreso de maquinaria y personal, lo que deja abierta la posibilidad de un retraso en la entrega del proyecto.
Según Lino de la Barrera, vocero de la Municipalidad de Miraflores, la sanción se originó cuando un trabajador de la empresa encargada, ZigZag, impidió el ingreso de los fiscalizadores municipales. “Alguien dentro de la empresa tomó la decisión de continuar trabajando pese a las observaciones, lo que nos llevó a imponer la suspensión de actividades y una multa equivalente a 10 UIT”, explicó.
El teleférico busca conectar el malecón de Miraflores con la Playa Redondo a través de dos cabinas con capacidad para 15 pasajeros cada una, en un sistema de vaivén. A pesar de la paralización, representantes de ZigZag se encuentran actualmente en Suiza, en la fábrica de la empresa Doppelmayr, supervisando la entrega de las cabinas que zarparán hacia Lima en los próximos días.
CONVERSACIONES ENTRE EMPRESA Y MUNICIPIO
Ante la incertidumbre sobre un posible retraso, De la Barrera aseguró que están trabajando de forma coordinada con la empresa para resolver los problemas y retomar el ritmo acelerado de construcción. Se espera que en los próximos días la obra sea reactivada, con miras a que Miraflores cuente con el tan esperado teleférico en el plazo previsto.