Un violento accidente de tránsito se registró en Lince. Dos buses, uno del Corredor Azul y otro de la empresa Evipusa, colisionaron fuertemente en la intersección de las avenidas Arequipa y Pardo de Zela. En cuestión de segundos, el asfalto se cubrió de gritos, cristales rotos y pasajeros heridos. Los rescatistas actuaron de inmediato para evacuar a los afectados, algunos de ellos incapaces de moverse por el dolor.
Una joven, entre sollozos, rogaba que llamaran a sus familiares mientras intentaba explicar lo ocurrido. El conductor del Corredor Azul fue sacado con collarín y trasladado de urgencia. Otros heridos eran acomodados en camillas entre el sonido de sirenas y órdenes apresuradas. Según el parte oficial, diez personas resultaron heridas, dos de ellas con lesiones de mayor gravedad.
Testigos apuntan a un presunto error de la policía de tránsito. Aseguran que un agente dio pase al bus naranja para facilitar el paso de una ambulancia, lo que habría provocado la colisión. "Le dijeron que avanzara, pero no se dio cuenta del otro bus", narró un vecino. Mientras tanto, el conductor del bus Evipusa fue interrogado por la policía, pero evitó responder a la prensa. La empresa registra más de 6,000 soles en multas vigentes.
REMOLCARON VEHÍCULOS AFECTADOS
Pese a que hay cámaras de seguridad a escasos metros del lugar, ninguna captó el momento exacto del impacto. Luego de trasladar a los heridos, los bomberos remolcaron los vehículos siniestrados y la vía fue reabierta horas después. El caso ha reabierto el debate sobre la seguridad vial en zonas con alto tránsito y el rol de los agentes en la prevención de estos accidentes.