Diego Pérez Cortés y Jerónimo Clever Santiago Retuerto fueron asesinados de manera fría y brutal cuando se encontraban bebiendo licor al interior de un inmueble ubicado en el cruce de las avenidas Vía Láctea y José Carlos Mariátegui, en la zona de Huaycán. Ambos fueron acribillados con once disparos por parte de sicarios que irrumpieron violentamente en el lugar. Una de las víctimas falleció sin siquiera levantarse de su silla.
El doble homicidio ocurrió en un supuesto bar clandestino ubicado en el segundo piso del inmueble. Según las autoridades, cuatro sujetos a bordo de dos motos ingresaron al lugar, dispararon contra las víctimas y otras dos personas, y luego escaparon con rumbo desconocido. Serenazgo y la Policía ejecutaron un operativo cerco tras escuchar la ráfaga de disparos, pero fueron atacados por los delincuentes, lo que dejó como saldo un agente herido.
El policía herido fue identificado como Luis Antonio Centella Canicela, quien recibió un impacto de bala en el tórax durante la persecución. Fue trasladado de emergencia al hospital de Huaycán y luego derivado al Hospital de la Policía. Minutos más tarde, en el cruce de las avenidas Circunvalación con Los Incas, las fuerzas del orden lograron detener a uno de los presuntos implicados, quien sería de nacionalidad venezolana.
HAY DOS HERIDOS
Otras dos personas, ambas mujeres que se encontraban dentro del establecimiento, también resultaron heridas durante el ataque y fueron trasladadas al hospital de Huaycán. El detenido fue llevado inicialmente a la comisaría del sector, pero el caso fue asumido por la División de Homicidios de la Dirincri, por lo que fue derivado a su sede en la avenida España para continuar con las investigaciones.