El litoral peruano enfrenta uno de los oleajes más intensos de los últimos años, con impactos devastadores en varias regiones costeras. En el norte, especialmente en Piura y Tumbes, las olas gigantes desaparecieron embarcaciones, afectaron a miles de pescadores y obligaron al cierre de negocios y espacios públicos. Este fenómeno, originado por un poderoso sistema de olas que cruzó desde Hawái y California, llegó también al Callao, donde dañó la infraestructura de la Plaza Grau.
El Centro de Operaciones Nacional (COEN) informó que 91 de los 121 puertos del país han sido cerrados como medida preventiva. La Dirección de Hidrografía y Navegación del Perú advirtió que estas condiciones representan solo el inicio del fenómeno, ya que se espera que la marea más alta ocurra en los próximos días. A pesar del peligro, algunos curiosos se acercaron a zonas como La Punta para observar el evento natural, ignorando las recomendaciones de las autoridades.
En Miraflores, la falta de banderas rojas de advertencia permitió que bañistas ingresaran al mar sin restricciones, lo que incrementa los riesgos. Por su parte, el especialista en recursos hídricos Abraham Levy señaló en redes sociales que el país enfrentará hasta cuatro oleajes consecutivos provenientes del Pacífico Norte, con impactos previstos hasta el 1 de enero de 2025, y posiblemente más allá de esa fecha.
LLAMADO A LA POBLACIÓN
Las autoridades hacen un llamado a la población a mantenerse alejada de las zonas costeras afectadas y a respetar las indicaciones de seguridad. La magnitud de este evento natural no solo pone en riesgo vidas humanas, sino que también deja en evidencia la necesidad de fortalecer los planes de prevención ante fenómenos climáticos extremos en el litoral peruano.