Los agentes de la Policía Nacional, en coordinación de un equipo de fiscales de Lima Norte, realizaron la reconstrucción del crimen de Rubí Ferrer, trabajadora sexual que fue ultimada a balazos el pasado 13 de febrero en el distrito de Carabayllo.
De la diligencia participó Jackson Alberto Sáenz de 40 años de edad, quien habría sido el chófer encargado de trasladar a los sicarios que acabaron con la vida de la mujer transgénero.
Según las investigaciones policiales, el crimen de Rubí Ferrer se produjo por el control del Jirón Chancay, en el Cercado de Lima. Al parecer, ella se habría opuesto al ingreso de meretrices extranjeras.
En venganza, los sicarios de la banda "Los Hijos de Dios", una facción de la organización criminal "Los malditos del Tren de Aragua", secuestraron a Rubí y luego la trasladaron hasta el distrito de Carabayllo donde fue asesinada a balazos.
