Alrededor de 100 alumnos de secundaria deben realizar sus clases diarias en una losa deportiva y a la intemperie, debido a que el terreno del Ministerio de Educación no se ha entregado ni se ha construido el colegio desde el 2017.
Según los padres de familia, la responsabilidad recaería en la encargada de la UGEL 2, que en lugar de apoyar los pedidos solo les hacen perder el tiempo. Lo que exigen los padres de familia es que la UGEL realice las acciones para agilizar la construcción del centro de estudios.
Esta situación inició el 2017, cuando se crea la institución educativa Abraham Valdelomar Pinto que funcionaba en el colegio Chasqui, pero ahora que el colegio está a punto de derrumbarse por la pésima infraestructura, ya no puede acoger a los estudiantes del colegio Abraham Valdelomar.
Los padres de los niños indicaron que el Ministerio de Educación archiva sus reclamos y pedidos para resolver este dilema que ya lleva cinco años sin una solución.
