Fiestas, alcohol, piruetas y prostitución en San Juan de Lurigancho. La calle Zafiro y alrededores han sido tomados por un grupo de por lo menos 10 hombres y mujeres de nacionalidad venezolana a bordo de motos lineales, quienes utilizan el estacionamiento de un hostal como guarida.
Las fiestas callejeras se han convertido en dolor de cabeza para los vecinos no solo por la música a todo volumen que dura hasta tempranas horas del día, sino que también es un eventual foco infeccioso, ya que ninguno de estos usan siquiera mascarillas.
Los vecinos aseguraron que este tipo de actos son constantes y que puede llegar iniciar en horas de la tarde, por lo que han solicitado a la policía y a la municipalidad del distrito intensificar el patrullaje en la zona.