La Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil), en conjunto con la Fiscalía, la Policía Nacional y la Municipalidad de Jesús María, intervino un call center de Scotiabank que tenía 330 personas trabajando en sus instalaciones.
Dicha inspección se realizó esta mañana y se encontró que el número de trabajadores superaba el límite permitido (10%) que se estableció para evitar el contagio del nuevo coronavirus (COVID-19).
Ante el hecho, se dispuso a enviar a 50 de los trabajadores a sus hogares por recomendación de la Fiscalía para salvaguardar la salud de los mismos, ya que Scotiabank mantenía al menos al 30% de colaboradores.
Cabe resaltar, que se decretó en el Estado de emergencia nacional que trabajadores de sectores esenciales, como entidades financieras y personal de los concesionarios de telecomunicaciones o call center, laboren para no paralizar dichos rubros.