Un joven de la etnia Awajún terminó con un tronco incrustado a la altura del abdomen, luego de sufrir un accidente en Yurimaguas, región Loreto.
La víctima fue identificada como Rimer Napatza Flores y todo ocurrió tras aparentemente haberse resbalado desde lo alto de un tanque de agua, cayendo de una altura de aproximadamente cinco metros sobre un poste de madera que lo atravesó.
Posteriormente el joven fue auxiliado, pero antes de ser trasladado al hospital de Santa Gema, se tuvo que cortar el tronco con una motosierra.
Sin embargo, debido a su delicado estado de salud, el agraviado fue llevado en un avión de la Fuerza Aérea del Perú (FAP) hasta el hospital Dos de Mayo en la ciudad de Lima.
En dicho nosocomio fue intervenido quirúrgicamente, donde 10 médicos participaron del proceso que duró alrededor de seis horas, lográndole retirar el madero de aproximadamente 10 centímetros, el cual le provocó un orificio en la zona abdominal que no afectó ningún órgano vital.
Por su parte, Napatza Flores, permanecerá internado y bajo observación en el mencionado hospital, mientras dura su recuperación.