'Mataste a mi esposo’ o ‘Tarata no se olvida’, son algunos de los carteles que varias personas han llevado hasta las afueras del penal Ancón II, ubicado en el distrito del mismo nombre, para mostrar su rechazo ante la inminente liberación de la sentenciada por terrorismo Martha Huatay.
Ubicados a la altura del kilómetro 42 de la Panamericana Norte, miembros de la Federación Nacional de Víctimas del terrorismo se manifestaron en contra de la salida de la Martha Huaray, quien el día de hoy finaliza su condena de 25 años de prisión por el delito de terrorismo.
Entre las protestantes se encontraba María López Alejos, viuda del policía asesinado en 1989, Néstor Percy Landeo Lozano y otros familiares de personas víctimas de los actos terroristas de Sendero Luminoso.