Miles de manifestantes se hicieron presentes en el frontis del Parlamento de Cataluña y exigieron la libertad de los "presos políticos", luego de que el ex vicepresidente del gobierno regional Oriol Junqueras y ocho ex consejeros de su gabinete fueran puestos en prisión.
La fiscalía española ha solicitado prisión preventiva contra el destituido presidente Carles Puigdemont y otros exconsejeros quienes no acudieron a su citación por rebelión, sedición y malversación.
De ser aprobado, los acusados podrían ser arrestados en cualquier momento y ser puestos a disposición de un juez, que deberá decidir si les envía o no a la cárcel.
Como se sabe, Puigdemont ha manifestado públicamente su intención de no comparecer y ha solicitado efectuar declaración por videoconferencia, sin ofrecer dato alguno su paradero actual, sin embargo se informó que podría encontrarse en Bélgica.
El líder independentista también ha afirmado que por el momento no buscaría asilo político y que no tenía planeado volver a España, ya que desconfiaba de la autonomía de la justicia de su país.