Bajo estrictas medidas de seguridad, Moscú se prepara para la llegada del Año Nuevo. Y es que tras el ataque de Berlín, la presencia policial se ha incrementado alrededor de los mercados y parques emblemáticos que cada año son visitados por cientos de turistas.
Como se sabe, Rusia es uno de los países más visitados en la temporada de fiestas, donde los emblemáticos shows de fuegos artificiales lo convierten en centro de atracción, y por ello, también en posible blanco de ataques.
Por otro lado, las luces decorativas ya iluminan los alrededores de la ciudad de Liaoyong en China a la espera del Año Nuevo. Árboles, piletas y hasta las estructuras están cubiertas con bombillas multicolores.
Y en Nueva York, muchos se reunieron para botar los malos recuerdos, nada menos que lanzándolos a una trituradora. Los participantes escribieron su mal recuerdo del 2016 en un pedazo de papel y junto con las fotografías, facturas y otros artículos de descontento, los tiraron en un basurero.