Donald Trump todavía no ha juramentado a su cargo de presidente en Estados Unidos, sin embargo ya ha generado tensión diplomática con el gobierno de China.
El magnate recibió esa llamada el último viernes 2 de diciembre de parte de la mandataria Tsai Ing-Wen. Fue una conversación que quebró casi cuarenta años de silencio diplomático entre ambos países.
Mike Pence, electo vicepresidente, salió en una entrevista para poner paños fríos a la situación. Indicó que a partir del 20 de enero próximo se verá la agenda internacional.
Donald Trump, en tanto, cuestionó, a través de su cuenta en Twitter, la forma en que el comercio del país norteamericano compite en territorio chino.
Y coincidentemente Qiu Xiaoqi, embajador del gigante asiático en México, dijo que ambas naciones pasan por su mejor momento histórico, por lo que las relaciones bilaterales tendrán muchos frutos.