Un niño de 10 años perdió la vida en uno de los toboganes acuáticos más alto del mundo situado en el parque Schlitterbahn, de la ciudad de Kansas City, en Estados Unidos. El tobogán Verruckt tiene una altura equivalente a un edificio de 17 pisos.
El menor fue identificado como Caleb Thomas Schwab, hijo de Scott Schwab, representante republicano de Olathe y un reconocido político de la ciudad donde funciona este parque de diversiones.
Según indicaron algunos testigos, el pequeño falleció cuando iba por el tobogán en un bote inflable. Algunos indicaron que fue por el arnés de protección que no funcionaba bien en esos momentos.
El tobogán Verruckt fue reconocido como el más alto por el libro Guinness de Récords del Mundo, y tiene 264 escalones para poder llegar hasta su cima. Por otro lado, la policía viene realizando las investigaciones respectivas del caso. En tanto, el parque acuático por el momento se encuentra cerrado.