La situación de la Federación Peruana de Fútbol (FPF) alcanzó su punto crítico tras la detención preliminar de su presidente, Agustín Lozano, quien rodeado de policías y enmarrocado, abandonó su vivienda en San Borja tras la orden judicial de 15 días de detención preventiva.
Esta detención es parte de una investigación sobre una red criminal involucrada en diversos delitos dentro del fútbol peruano. El operativo comenzó a las 2 a.m. e incluyó simultáneos allanamientos en diversas ciudades, como Lima, Huánuco, Amazonas, Piura, Lambayeque y Tumbes.
En total, se realizaron 17 allanamientos, y se detuvieron a 8 personas implicadas en la organización criminal "Los Galácticos", liderada presuntamente por Lozano. La abogada de Lozano, Giuliana Loza, rechazó las imputaciones y calificó la detención como desproporcionada.
ACUSACIONES GRAVES
El Ministerio Público sustentó su caso en una investigación de 140 páginas, donde se detallan las acciones ilícitas de Lozano y otros 21 involucrados. Entre las acusaciones destacan el fraude, lavado de activos, corrupción, y otros delitos relacionados con el manejo de derechos de televisación, sobornos, y mal manejo de recursos de la FPF.