Un nuevo hallazgo, media tonelada de clorhidrato de cocaína enterrada en Sullana vuelve a poner los reflectores sobre Marco Benavides, un conocido empresario constructor investigado desde hace diez años por narcotráfico y lavado de activos; quien además es tío de Bryan Camps implicado y detenido por el caso Oropeza, también por vínculos con el narcotráfico.
Según la policía, este grupo criminal estaba listo para enviar al exterior tres toneladas de drogas, envío que se frustró tras la incautación del millonario cargamento de estupefacientes valorizado en más de 19 millones de euros.
Dos exportaciones previas en julio y octubre pasado solo de fruta y la tercera que iba a salir cargada de droga, dan cuenta de la logística de esta organización criminal. Un minucioso trabajo permitió a los agentes antidrogas seguir al milímetro a los miembros de este grupo delictivo. Cada reunión y seguimiento registrado en video. "Hemos identificado a los ejecutivos y a los obreros", contó el coronel PNP, Deny Rodriguez.
Detrás de esta organización figuran dos personajes claves identificados como José Carlos Ojeda y el financista Marco Benavides. Y como parte de esta historia de narcotráfico, era un próspero empresario trujillano, pero su finalidad era enviar cientos de cocaína a Europa.
