Las autoridades de filipinas informaron que la colisión de dos embarcaciones deja hasta el momento 31 muertos, sin embargo, la cifra puede seguir aumentando ya que la Guardia Costera tuvo que suspender las tareas de rescate debido al mal tiempo.
El barco MV Saint Thomas Aquinas se hundió tras colisionar con el carguero MV Sulpicio Express a un kilómetro de distancia de las costas de la localidad de Cebú y, según medios del país, cerca de 170 personas se encuentras desaparecidas, mientras que 690 resultaron heridos.
El Saint Thomas tenía una capacidad para 900 personas y en el momento del choque habían 870 a bordo, mientras que el MV Sulpicio solo llevaba a 36 tripulantes, quienes resultados heridos.
Luis Tuason, vicecomandante de la Guardia Costera, indicó que se presume que muchos de los desaparecidos están atrapados en el barco hundido a 30 metros de profundidad, situada a unos 570 kilómetros al sur de Manila.
Este tipo de accidentes en Filipinas causa decenas de muertes cada año, debido al naufragio causado por el mal tiempo, la antigüedad de las embarcaciones, la sobrecarga o el incumplimiento de las normas de seguridad.