El gobierno de El Salvador decretó el último sábado el estado de emergencia en las cárceles donde están recluidos integrantes de pandillas rivales que han provocado la muerte de 50 personas en medio de la pandemia del coronavirus.
Se tratan de las pandillas rivales Barrio 18 y Mara Salvatrucha que cuentan con unos 70.000 integrantes y se dedican al sicariato, el narcotráfico y la extorsión de comerciantes y transportistas.
Por ello, el presidente Nayib Bukele también ordenó que los miembros de las pandillas rivales sean juntados en una sola celda. Además, se autorizó a que las fuerzas de seguridad ejerzan la fuerza letal está autorizado para defensa propia.
Sin embargo, está situación ha generado temor entre los organismos humanitarios ante el temor de la violencia que se pueda desatar y hacen responsable al gobierno de las posibles consecuencias.